El concepto de Estímulo Supernormal es una de esas ideas que es interesante conocer porque nos ayuda a entender algunos aspectos de nuestro comportamiento. Los primeros estudios de los estímulos supernormales, así como el propio nombre en sí, se lo debemos al etólogo premio Nobel de Fisiologia o Medicina, Niko Tinbergen (por cierto perteneciente a la única familia con dos premios Nobel en sus filas ya que su hermano Jan Tinbergen fue ganador del primer premio Nobel de Economía en 1969, con Ragnar Frisch).
Tinbergen realizó experimentos de muchos tipos, por ejemplo, con peces espinosos. El macho tiene un vientre de color rojo y defiende su territorio, donde construye un nido en el centro, y si otros machos entran en él les ataca, mientras que a las hembras las guía al nido para que pongan sus huevos. Tinbergen y sus alumnos construyeron peces falsos de madera pintada y fueron variando los modelos hasta descubrir que es el color rojo de la parte inferior del cuerpo lo que constituía la señal para que el pez ataque. Sin embargo, el color no era lo determinante para detectar a las hembras. Los machos escoltaban a hembras falsas de madera al nido si tenían la tripa redonda, una característica de las hembras cuando van cargadas de huevos. Pero lo más interesante de los descubrimientos de Tinbergen es que los peces falsos podían sobrepasar el poder de los estímulos naturales: los machos ignoraban a otros machos reales para atacar a peces falsos de madera que tenían un vientre pintado de un color rojo más brillante y llamativo que el natural. O escoltaban a una hembra falsa de madera con una tripa más abombada de lo normal en lugar de a una hembra real.
También realizaron experimentos con huevos de gansos y de pájaros. Por ejemplo, pintaron huevos falsos de un calor azul mucho más llamativo que los huevos reales de la especie y los pájaros dejaban de lado sus propios huevos y quería incubar los falsos. Algunos eran tan exageradamente grandes que el pájaro resbalaba por él y se caía pero continuamente volvía a intentar subirse encima. Tinbergen llamó a este fenómeno “estímulo supernormal” y publicó algunos trabajos explicando el concepto de que los instintos estaban codificados para responder a ciertos estímulos, o rasgos, y que la amplificación de estos rasgos podía engañar al animal. Por lo tanto, un estímulo supernormal es una versión exagerada de un estímulo al cual hay una tendencia a responder, o, dicho de otro modo, cualquier estímulo que desata una respuesta más fuerte que el estímulo para el cual evolucionó esa respuesta. Es interesante señalar que unas especies se sirven de este truco para atacar a otras. Por ejemplo, el cuco pone unos huevos que a los padres adoptivos les resultan más llamativos y atractivos de incubar que los suyos propios; y las bocas de las crías de cuco cuando nacen, tienen también un color más llamativo lo que hace que los padres adoptivos las alimenten con preferencia a sus propios hijos.
El caso es que en la civilización moderna en la que vivimos, los humanos estamos expuestos a cantidad de estímulos supernormales sin que seamos conscientes de ello. Yo voy a mencionar algunos pero dejo a la imaginación del lector buscar muchos más:
-Alimentos artificiales: Un bollo de chocolate relleno de chocolate y con chocolate caliente por encima, es un estímulo supernormal. La Coca-Cola es otro...la comida basura...Todos estos productos se aprovechan de una característica humana que es la apetencia por los dulces que se ha desarrollado tras millones de años de evolución. Los alimentos dulces, como las frutas, indicaban un alto valor calórico y por lo tanto hemos desarrollado una preferencia por ellos. La industria alimentaria diseña, apoyándose en este instinto, productos, como las bebidas dulces hipercalóricas, que gustan más a los niños y adultos que el agua.
-Pornografía. El varón humano está diseñado para responder a los estímulos procedentes de una hembra humana real, pero no para excitarse ante pixels en una pantalla, o manchas de tinta en una revista pornográfica. Sin embargo, como el macho humano está diseñado para responder ante claves visuales principalmente, es fácil engañarle con imágenes de una película o una revista.
-Los implantes mamarios de silicona, son un estímulo supernormal
-La novela romántica, es un estímulo supernormal. April Gorry realizó un estudio en 1999 de 45 best-sellers de novela romántica en los que observó lo siguiente:
- El punto de vista es el de la heroína y el argumento tratar de conseguir el hombre adecuado.
- El héroe era siempre más viejo que la heroína ( de media 7 años, en la vida real los hombres suelen ser 3 años mayores de media que sus parejas)
- Los héroes son altos ( 6 pies o más)
- Adjetivos para describir al héroe: muscular, fuerte, grande, bronceado, guapo, masculino, activo, lleno de energía...
- Rasgos de personalidad del héroe: audaz, tranquilo, seguro de sí mismo, inteligente.
- Respuesta del héroe: declararle su amor, quererla más que a ninguna otra mujer de su vida, desearla sexualmente, considerarla única y desear protegerla.Si contrastamos todas estas observaciones con lo que dicen los estudios de la psicología amorosa femenina, por ejemplo los trabajos de David Buss, vemos que coinciden punto por punto con todo lo que buscan las mujeres en un hombre. Nos encontramos de nuevo ante la explotación de un instinto, de una tecla, en este caso de la naturaleza femenina.
-Los programas de cotilleo son un estímulo supernormal. El ser humano es un animal social y para su supervivencia el mundo social es mucho más importante que el físico. Saber quién es aliado de quién, quién se acuesta con quién, quién odia a quién, de quién te puedes fiar y de quién no, es algo fundamental. Aquellos que tenían una buena información social la podía utilizar en su propio beneficio ( para buscar aliados, parejas, para vencer a enemigos...), y el que navegaba mejor el mundo social dejaría más copias de sus genes. Como las interrelaciones sociales son complejas y variadas es imposible estar presente cuando ocurren y absorber la información directamente. Por eso la gente se muestra ansiosa por obtener esa información social indirectamente. El cotilleo es universal y esa avidez por la información social podemos considerarlo un instinto. Las televisiones lo que están haciendo con programas como los que tenemos a la tarde en todas las cadenas, o con Gran Hermano, es lo mismo que les hacía Tinbergen a los peces espinosos poniéndoles llamativos peces de madera de colores para que entraran al trapo: tenemos una avidez por conocer la vida de la gente y entonces ellos nos ponen a unas personas viviendo en un medio cerrado y encima una cámara en medio de la vida de esa gente...irresistible! un éxito absoluto.
Creo que con estos ejemplos es suficiente para que os hagáis una idea del juego que da este concepto de los estímulos supernormales. El hecho clave es que todos estos estímulos artificiales de la vida moderna tocan una tecla de la naturaleza humana. Nada puede tener el éxito que tiene la pornografía, el cotilleo, los móviles, la novela romántica, o el fútbol, que mueven todos ellos miles de millones de euros, si no se dirigen a un instinto previo del ser humano. No creo que una televisión que se dedicara a retransmitir partidas de ajedrez pueda tener un éxito comparable, y todos sabemos la audiencia que tienen los documentales sobre evolución de la 2. Las teclas que tocan no son tan potentes.
Referencia:
Deirdre Barret Supernormal Stimuli. How primal urges overran their evolutionary purpose. W. W. Norton & Company New York- London 2010